Sé inteligente.

No puedes rendirte antes de haber perdido. No puedes castigarte por cometer errores. Nadie es perfecto. El ser humano es así. No es solamente un dicho eso de que "el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra". Y es inevitable. Lo único que tienes que hacer es aprender a convivir con ellos, intentar que tus errores se noten lo menos posible y que no afecten a los que quieres más de lo debido. Aunque en muchas ocasiones es imposible. La mayoría de las veces no nos damos cuenta de cuánta repercusión tendrán nuestros actos en nosotros mismo, como para darnos cuenta de la que tendrán en los demás. Pero tienes que ser inteligente, o al menos parecerlo. Muéstrate a los demás tal y como eres, pero piensa antes de abrir la boca. Porque también sabes ese otro dicho de que "por la boca muere el pez".